Sí. El ambiente mediático de hoy, donde lo fatuo, lo estúpido, lo vano e intrascendente es destacado y lo importante se minimiza, es muy destructivo para la sociedad.
Comenzando con los tuits de los presidentes, como es la moda actual. Antes te decían o te parecía que algún presidente, político, actor o actriz era un poco estúpido; pero ahora ellos se encargan de exhibírtelo, y todos tan tranquilos, como Pancho por su casa. El mundo y su famoso "tejido social", con sus costumbres y particulares morales se está rasgando. Se está desacralizando todo, como bien dijo mi amigo Julio Antonio Corigliano, poeta y filósofo. Está todo revuelto en el mismo maloliente e inmundo lodo mediático: la violencia, la destrucción familiar, la desesperanza, el robo, la pérdida de rumbo de la juventud, el desconsuelo de los viejos, la corrupción, la necesidad de un momento de fama (aunque sea de papel crepé), la falta de respetos (propios y ajenos), los miedos, la hipocresía, el ensalzamiento de lo material, la destrucción metódica de las verdades esenciales para transformarlas en show, en farsa. En fin, el reinado de "big brother" donde puedes participar en las vidas aventuradas de ficción, asépticas y seguras de los otros a través de la pantalla chica, que señorea en cada casa, cómodamente despachurrado en el sofá, con tu bolsa de papas fritas y lata de cerveza en mano. La suma de valores completamente trastocada. Lo que era bueno ahora es malo y viceversa. Y así vamos, con el rumbo cada vez más errático, tal vez ya perdido para siempre.
En fin. Welcome to the present future!
Manuel te felicito, aunque realmente esto no tendría que haberlo leído hoy sábado por la mañana comenzando el fin de semana (demasiada realidad para un weekend jaja) es real, verdad y abre los ojos de los dormidos, aunque muchos no quieren darse cuenta o no pueden porque el engranaje los atrapó.
ResponderEliminarYo creo que esta nota debería haberse titulado Welcome to the future, como la terminaste, aunque en este caso el futuro es hoy, más que nunca.
Será este el Postmodernismo en que todo es relativo?
bueno. ya está, voy a acostarme de nuevo, me levanto de nuevo, y no leo tu post así tengo un fin de semana inmerso en el maloliente mundo mediático, sin darme cuenta JA JA!! Realmente sos un muy buen espectador de la realidad!!!
La biblia junto al calefón para todo el mundo!!!
Buen fin de semana, Manuel!
Hola Roberto. Muy bueno el comentario acerca del título. Como ves, ya lo cambié.
EliminarPerdón por hacerte acostar y levantar nuevamente...
Abrazos totales.
Estimado Manuel... te agradezco hayas recordado una conversación que hemos tenido hace tiempo... y en efecto nos conmovía a ambos, tanto como hoy, la desacralización del mundo, o lo que Paul Ricoeur llama la pérdida de la maravilla... y claro, luego de leerte está claro que la única fantasía con la que nos topamos ya no es el misterio sino la sonrisa careta de una bella muchacha que miente una felicidad que no tiene y declara una estupidés que le estraga el alma, quién tiene la suerte, qué digo, el milagroso don, de dar con una sirena, con una ninfa, un ángel... o un simple gnomo... o de sentir que lo mejor de nuestros sentimientos nos aproxima al misterio, a lo que ya no nos incumbe, no está en nuestro poder ni lo estará, pero nos fascina por ello mismo... y nos enamora y nos convoca... como todo abismo, como todo camino que inicia hacia el horizonte un infinito. Por otro lado, hoy por hoy no pienso hacerme cargo del Mundo... sabés, creo que esto de hablar del mundo me supera, yo no sé cómo va el mundo porque hay un infinito mundo que no pienso ni por asomo porder comprender... no sé que están haciendo en este momento las gaviotas en una playa lejana como tampoco los niños que ríen en Kualampur... o que mueren en Caballito o en villa Bosh... No puedo representarme el mundo... y son además de infelices, ciegos quienes creen poder pensarlo... Te dejo una adagio chino del 200 antes de Cristo: Comprenderás entonces una verdad eterna: siempre hay una casa pacífica donde ser tú mismo. Te digo, y esto aún cuando veas caer fuego del cielo o se cierren los ojos de los que más amas o se detenga tu corazón. Lo sagrado se alla plenamente en el fondo del horror o de la felicidad... el infinito no se hace a un lado por nosotros, por suerte... Julio.
ResponderEliminarImposible olvidarme de aquella conversación, paradójicamente la primera y la última que tuvimos, hace varios años ya, en una confitería de Caballito (¿o Flores) en la Av. Rivadavia, en tu Buenos Aires. Tu definición de qué es lo que está sucediendo en el mundo, pues es universal, clarificó y explicó totalmente mi búsqueda de respuesta al desorden que viven las sociedades en estos días. DESACRALIZACIÓN.
EliminarAbrazos totales, mi estimado Antonio.